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La importancia del juego para las personas mayores

Dentro del programa de terapia ocupacional en geriatría y gerontología, las sesiones de juego para personas mayores tienen una finalidad primordial y muy completa. Se trata de combinar ejercicio físico, estimulación cognitiva, cuidado de la salud mental, diversión y relaciones sociales satisfactorias. Todo ello aporta una gran calidad de vida en la vejez y convierte a los juegos para adultos mayores en una actividad terapéutica irremplazable.Párrafo nuevo

Juegos para ancianos para incrementar su calidad de vida

En nuestra residencia para la tercera edad desplegamos toda una serie de actividades de terapia ocupacional y psicosociales para promover el bienestar y la autonomía de nuestros residentes. Entre ellas, además de la gerontogimnasia, la estimulación cognitiva y la laborterapia, destacan las actividades de juego para las personas mayores.

Y es que la etapa de envejecimiento se caracteriza por proporcionar mucho tiempo libre, sin tantas responsabilidades ni obligaciones horarias. Pero la clave de un envejecimiento saludable estriba en saber disfrutar de un tiempo de ocio de calidad; que favorezca la actividad física, ejercitar la memoria para prevenir el deterioro cognitivo, el cuidado de la salud mental y una rica vida social. Y si además, estas actividades de ocio se realizan en gran parte al aire libre y de forma lúdica, se logra entrenar todas las áreas de la salud simultáneamente.

Es por ello que en la Residencia Argaluza destinamos gran parte de nuestros recursos y actividades terapéuticas y psicosociales a los juegos para ancianos. Es decir, actividades lúdicas de todo tipo de carácter gerontológico, destinadas a incrementar el bienestar de las personas de edad avanzada.

No en vano, la literatura gerontológica evidencia la importancia del juego en las personas mayores como un aspecto primordial para su salud y su calidad de vida. Una herramienta espléndida e integral para incentivar sus relaciones sociales y, con ello, alejarlos del nocivo aislamiento social. Un fenómeno que nuestro centro residencial intenta combatir desde todos sus servicios de atención integral y centrada en la persona mayor.

Así pues, aprovechando nuestro equipo de terapeutas, nuestros amplios jardines y nuestras instalaciones adaptadas a la tercera edad; llevamos a cabo todo un conjunto de actividades físicas y recreativas donde el juego es más que divertimento. Es todo un método terapéutico y ocupacional.

El juego para personas mayores como promotor de un envejecimiento activo

El afamado escritor Julio Cortázar, a la edad de 69 años, comentó en una entrevista: «(…) Cuando yo hablo del juego, hablo siempre muy en serio. Como hablan los niños, porque para ellos el juego es una cosa muy seria. (…) El juego está integrado en la esencia de la vida. (…) Nosotros [los adultos] lo racionalizamos y lo convertimos en sinfonías, cuadros, novelas,…». En estas palabras, Cortázar supo sintetizar perfectamente la importancia del juego para los adultos mayores y para todas las etapas de la vida en general.

En efecto, el juego supone un método muy atractivo y sencillo de fomentar el ejercicio físico, el entrenamiento de las habilidades cognitivas y la creatividad. Así como es de gran utilidad para promover la autoestima, el autoconcepto positivo y el desarrollo emocional en las personas ancianas.

Asimismo, el juego tiene una importancia vital en nuestro desarrollo evolutivo, social y emocional. De ahí que, a la hora de tratar con adultos mayores, las actividades psicosociales lúdicas sean tan beneficiosas. Pues resultan un modo sutil y agradable de fomentar el envejecimiento activo. Por eso se fomentan tanto los juegos para personas mayores en las residencias.

Así, en Argaluza realizamos sesiones de juegos para personas mayores de diversa índole. Desde juegos de mesa tradicionales como el bingo o las cartas hasta lanzamientos de aros o pelotas, partida de bolos o mini golf. Desde juegos de lógica o juegos de memoria hasta juegos de psicomotricidad, de nutrición o basados en el ejercicio físico.

Los beneficios que aporta el juego a las personas mayores

Retomando las palabras expresadas por Cortázar, el juego es una cosa seria, sin duda. Pues las habilidades que adquirimos a través de él nos aportan recursos de suma importancia para afrontar la vida con éxito. Al tiempo que el juego, como elemento recreativo, supone una necesidad básica para el bienestar de los seres humanos. Pues su énfasis en el mantenimiento de un buen estado salud integral está más que constatado.

Por tanto, resulta un craso error considerar al juego como una mera actividad infantil o pedagógica. Es necesario mantener el espíritu lúdico a lo largo de la vida, porque su talante terapéutico resulta innegable.

Si bien, antiguamente existía la falsa creencia popular de que jugar era una forma de perder el tiempo, de holgazanear. O, en el mejor de los casos, su permisividad se reducía a los juegos de mesa, aunque sin dejar de atribuírseles un sentido de ocio banal. Sin embargo, las investigaciones centradas en las terapias ocupacionales y los juegos para adultos mayores demuestran lo contrario

Gracias a las habilidades que desarrollamos mientras jugamos, aumentamos nuestra creatividad y ejercitamos la neuroplasticidad. Eso significa que fomentamos más el pensamiento creativo o divergente, lo que nos permite encontrar soluciones alternativas a las situaciones más complicadas. O, dicho en otras palabras, ¡cuánto más juguemos, más geniales —o ingeniosos— nos volvemos!

El ejercicio de la plasticidad cerebral que logramos mediante el juego supone un recurso de incalculable valor para las personas mayores. Primero, porque refuerza sus habilidades cognitivas, lo cual impide un envejecimiento mental prematuro. Segundo, porque las prepara para encarar muchas situaciones complejas y los diversos cambios que se producen en la etapa de la vejez.

Asimismo, las actividades lúdicas promueven el proceso de socialización. Es decir, invitan a crear relaciones sociales sanas y satisfactorias, que a su vez ayuden a las personas mayores a sentirse integradas.

Los juegos para adultos mayores: mucho más que una actividad recreativa

Sin lugar a dudas, los juegos no solo son una actividad recreativa. En los niños y adolescentes cumplen la función de aprendizaje de habilidades físicas, cognitivas y sociales. Además de incrementar sus conocimientos sobre el entornoestimular sus capacidades sensoriales y desarrollar su pensamiento creativo, su imaginación.

Mientras que en el caso de los adultos mayores, el juego puede aportar armonía y entretenimiento a su vida, lo cual siempre viene genial. Pero, asimismo, las actividades de juegos en la tercera edad sirven como recurso terapéutico y de prevención de discapacidades y disfuncionalidades físicas, mentales y cognitivas. De ahí la promoción de los juegos físicos, psicomotrices o de estimulación cognitiva, por citar algunos, que realizamos en nuestra residencia para ancianos.

Por lo demás, existen juegos orientados a facilitar los procesos de rehabilitación funcional o recuperación física. Así, gracias a determinadas actividades lúdicas, nuestros residentes se recuperan de algunas convalecencias o secuelas de modo distendido. Es decir, sin sentir la presión de tener que realizar entrenamientos rehabilitadores aburridos.

De hecho, en la Residencia Argaluza aplicamos mucho las actividades psicosociales lúdicas para trabajar simultáneamente la rehabilitación funcional y psicológica de los mayores. Con ello logramos mejorar las capacidades funcionales de los usuarios, pero también elevar su salud mental y su bienestar personal. Por no mencionar que el proceso rehabilitador se desarrolla con más eficacia gracias a la implicación voluntaria de la persona mayor.

Por tanto, es indudable el poder terapéutico de los juegos, en cualquiera de sus formas. Si bien es cierto que cada tipo de actividad lúdica fortalece un área concreta de nuestra salud —física, psicológica, social o emocional—. Por eso, resulta conveniente combinar diferentes tipos de juegos.

Las residencias para mayores como espacios lúdicos, inclusivos y saludables

Los centros residenciales para ancianos tenemos la misión de ayudarles a disfrutar de un envejecimiento satisfactorio y digno. De ahí que debamos ofrecer un servicio de cuidados integrales, pero también un espacio idóneo para un envejecimiento activo, saludable y exitoso.

Para tal fin es primordial ofrecer toda una serie de actividades que no solo fomenten un estilo de vida sano, sino también placentero y motivador. Es aquí donde el juego para personas mayores tiene un protagonismo esencial. Pues les ayuda a disfrutar de ocio de calidad, que redunde en el mantenimiento de sus capacidades funcionales y cognitivas; así como de su autonomía personal y de una red de relaciones sociales enriquecedoras.

De: ARGALUZA

La alimentación: Su importancia durante el envejecimiento

Comer saludablemente es un asunto de gran importancia que se nos inculca desde que somos pequeños, sin embargo, cuando se trata de la alimentación para mayores, no hay otra alternativa. La nutrición en la tercera edad contiene características especiales y debe seguir un patrón, que ayude a mejorar la calidad de vida de las personas durante esta etapa de sus vidas.

La importancia de los alimentos es casi igual para todos, pero en especial, los niños y las personas mayores son los que deben de cuidar más aquello que comen, ya que la dieta es vital para su salud y desarrollo. Sin embargo, esto no quiere decir que descuidemos nuestra alimentación en otras etapas de la vida, ya que lo que comemos hoy, nos pasará factura el día de mañana.

¿Qué se debe comer en la tercera edad?

Es una pregunta que todos debemos plantearnos, no solo si convivimos en casa con abuelos u otros familiares mayores, sino porque todos seremos ancianos alguna vez, y debemos estar conscientes de que una adecuada alimentación durante la tercera edad, es de vital importancia para colaborar con la buena salud.

Para estar sanos es necesario contar con una buena alimentación, más aún cuando hablamos de la tercera edad. Y es que llevar una dieta adecuada puede minimizar los riesgos de padecer ciertas enfermedades, ya sean de tipo arterial, cardíaco, hipertensión, entre otros. Es muy importante incluir diariamente minerales, proteínas, vitaminas, grasas, carbohidratos y sobre todo mucha agua.

Nutrición para personas mayores

A medida que los años pasan, las necesidades nutricionales van cambiando. Cuando se está comenzando a salir de la adultez se hace necesario llevar una dieta equilibrada en la tercera edad en la que se deben reducir las calorías vacías y potenciar el consumo de proteínas, fibras, vitaminas, además de asegurar que la comida provea de calcio, hierro y demás minerales esenciales para la buena salud.

Con el paso de la edad, vienen asociados varios cambios, como son los fisiológicos y sociales que afectan considerablemente el estado nutricional de las personas mayores, y por ende sus pautas alimenticias.

Por ejemplo, cuando se pierden piezas dentales se reduce la salivación y se hace más difícil masticar bien los alimentos; también, los sentidos ya no son iguales, se van debilitando, y por tanto existe la posibilidad de que se pierda el interés por las comidas.

A lo anterior se le suma la pérdida progresiva de masa muscular que va ligada a menor demanda energética. Además, no podemos olvidar que durante esta etapa es usual la toma de medicamentos que podrían dificultar la absorción de nutrientes, por lo tanto, se triplica el riesgo de que un adulto mayor no esté bien alimentado si no se toman en cuenta todas estas condiciones y alteraciones que se viven durante la vejez.

¿Cómo debe ser la dieta a partir de los 70 años?

En la dieta a partir de los 70 se hace necesario revisar y modificar los hábitos alimenticios que se han venido teniendo para adaptarlos a las nuevas necesidades biológicas y cambio de vida. Para una vida sana después de los 50, se recomienda el mayor consumo de pescados, aves, huevos, lácteos desnatados, legumbres, cereales integrales y frutos secos, haciendo énfasis en que al menos la mitad de las proteínas que se consuman sean animales y vegetales.

Cualquier persona centrada o dedicada al cuidado de personas mayores debe de conocer las diferentes dietas para personas mayores, teniendo en cuenta varios aspectos fundamentales y lograr así la alimentación más acertada. Ciertamente se deben incluir grasas y proteínas, pero en su justa medida.

·       GRASAS: no deben superar el 25% de la dieta, prestando especial atención al cocinado y evitando el consumo de productos grasos. En cuanto a las proteínas, se han de incluir en un 20%, apostando por los lácteos desnatados y aumentando el consumo de pescados con la consecuente reducción de carnes.

·       FRUTA, CEREALES Y PASTA: en un 55%, siendo muy conveniente la ingesta de ciertos alimentos ricos en minerales y vitaminas A, B, C y D como son los frutos secos, el arroz, la patata, las frutas y las verduras que no pueden faltar en una dieta para personas mayores.

Las verduras y frutas en la alimentación para mayores

Una dieta para personas mayores debe incluir un consumo mínimo de dos raciones de verduras y hortalizas al día, así como de al menos 3 raciones de frutas entre comidas. Las verduras para la tercera edad son vitales, ya que aportan nutrientes necesarios que ayudarán a tener un mejor proceso de digestión y a mantenerse saludable.Para facilitar el proceso de masticación, los vegetales deben estar cocidos y preparados en forma de puré, mientras que las frutas pueden consumirse en forma natural si están bien maduras y suaves, en caso contrario en compotas, zumos o batidos, pero sin que estos incluyan azúcares procesados en su preparación.

Mayor consumo de fibra y agua durante la vejez

Con el paso de los años, el tránsito intestinal y el proceso de digestión se vuelven más lentos, por lo que pueden llegar a agudizarse los problemas de estreñimiento. Por ello, es aconsejable tomar entre 25 y 30 grs de fibra al día, combinada entre insoluble y soluble. La insoluble puede provenir de los cereales integrales, mientras que la fibra soluble de las frutas y verduras.Además, en toda dieta y en especial dentro de la alimentación para mayores, el consumo de agua es vital. Durante la vejez el porcentaje de agua en el cuerpo disminuye, para ello se recomienda tomar un mínimo de dos litros al día entre agua, zumos y caldos.

Alimentación sana para mayores: 5 comidas al día

Sabemos que muchas veces puede llegar a ser difícil el proceso de alimentación de una persona mayor. Ciertamente el apetito va mermando de una manera considerable y se suele comer un tercio o menos de la mitad de lo que se comía cuando se es joven.La importancia está en la variedad en los alimentos, el modo de preparación y las cantidades, que se puedan ir consumiendo al día. Los cambios organizativos en las dietas para ancianos son muy importantes para que no caiga en el aburrimiento, y haya más combinación de nutrientes en cada plato.

La comida, se puede repartir entre 5 o más ingestas al día, combinando las proteínas, fibras, hortalizas y vegetales, cereales y frutas. Siempre será mejor optar porciones pequeñas más veces al día, que las tres tradicionales comidas en porciones abundantes.

La depresión y el aislamiento, factores que influyen en su alimentación

Lógicamente, las personas de edad avanzada son las que cuentan con mayor riesgo de aislamiento. El resultado de esta soledad puede derivar en una depresión que puede afectar gravemente su alimentación.La razón es muy sencilla. La depresión hace que la persona tenga poca autoestima, lo que genera una pérdida de motivación preocupante a la hora de desempeñar ciertas actividades. El hecho de tener que cocinar para uno mismo, comer en soledad o tener que salir de casa para comprar comida, supone un gran esfuerzo físico y mental. De esa forma, los casos de desnutrición y deshidratación pueden ir unidos a situaciones de aislamiento y depresión.

Consejos de alimentación en la tercera edad según los expertos

Las personas mayores utilizan menos energía, pero necesitan consumir alimentos con la misma cantidad de nutrientes que el resto de adultos. Dicho esto, los expertos recomiendan que es de vital importancia escoger alimentos variados que sean saludables.Las calorías vacías en bebidas y alimentos como alcohol, refrescos, patatas fritas o dulces es conveniente evitarlos. En su lugar es preferible optar por alimentos bajos en grasas y colesterol.

La asistencia domiciliaria es un apoyo profesional altamente cualificado que conoce a la perfección estos consejos de alimentación. En cuanto a las empleadas de hogar internas, es importante que cuando se encuentran al cuidado de una persona se informen detalladamente sobre la dieta que se debe seguir en cada caso particular.

Otros consejos que se pueden tener en cuenta son:·       

Comer a menudo, pero en menor cantidad, para conseguir una mejor digestión.

·       Recordar que no solo es importante preparar una comida saludable sino sabrosa. Con la pérdida del gusto y el olfato en la vejez, se hace fácil que los abuelos pierdan también el gusto por comer. Reinventarse con los alimentos que se consumen y su forma de prepararlos es la clave.

·       Elegir las grasas correctamente también es importante. En la alimentación el adulto mayor debe evitar los postres grasos y las frituras.

·       Mantenerse activo a diario forma parte de la construcción de un estilo de vida saludable en la vejez. Así la fuerza muscular, los huesos y el corazón, también podrán verse fortalecidos, y serán el complemento perfecto a una dieta saludable en la tercera edad.

de CUIDUM: LORENA GARCIA SEP 2022


Ancianos solos en Navidad

¿Cómo mitigar esa sensación de soledad en nuestros mayores?

Con el paso de los años, las personas mayores han atravesado diferentes avatares de la vida: pérdida de seres queridos (entre ellos muy probablemente la del cónyuge que ha sido el gran apoyo de su vida), los hijos ya son mayores y cada uno hace su vida y para más inri, los problemas de salud aparecen.

Diferentes situaciones que acentúan y contribuyen a mantener el sentimiento de soledad que sienten muchos de nuestros mayores y que en esas fechas navideñas, caracterizadas por ser tiempo de tradición, costumbres y familia, no les deja ni un minuto.

Como antes decíamos, nuestros mayores ya están con achaques, problemas de salud que les convierten en personas dependientes y que inevitablemente en muchos casos, obligan a llevarles a residencias para poder recibir cuidados profesionales intensos y continuos. Pero antes de continuar es importante que hagamos esta distinción; una persona que está en una residencia para la tercera edad, NO ES un mayor ABANDONADO. Se escuchan muchos comentarios del tipo: “¡pobre hombre, a una residencia le han llevado para no hacerse cargo de él. Abandonado le han dejado!”. Para muchos hijos, sobrinos, etc., resulta tremendamente doloroso el no tener los medios adecuados en sus casas para que sus mayores reciban los cuidados pertinentes para su enfermedad, o por cuestiones laborales no disponen de todo el tiempo que su mayor requiere para los achaques que tiene. Pero por otro lado, el hecho de que nuestros mayores convivan con otros iguales en la residencia, no es excusa, también se suele oír: “mi padre está en una residencia y no está solo, está estupendamente acompañado, no hace falta que vaya cada dos por tres”El no llamarles, no atenderles, no visitarles, no preocuparse, eso SI ES ABANDONO.

Es importante que disfruten de una buena red familiar y/ o social, relacionándonos con ellos de acuerdo al nivel de energía y vitalidad que tengan.

Nada es perfecto en ninguna familia, y a unas por cuestiones económicas, por discusiones familiares, etc. no les gusta la Navidad. Pero en concreto a los mayores, es importante que les recordemos que hay muchas maneras de celebrar la Navidad y no todo son regalos y comilonas, de este modo contribuiremos a disminuir esa sensación de nostalgia y tristeza y les acercaremos algo más la tradición. Por ejemplo, para aquellos que aun puedan dar un paseíto (o en la silla de ruedas), les podemos llevar a mercadillos navideños, a visitar los diferentes Belenes de las parroquias, animarles a llamar a ese familiar con el que hace tiempo que no hablan, o escuchar villancicos todos juntos, entre risas y panderetas. En esta línea y para los que vivan solos o en residencias, podemos ayudarles a decorar su habitación o su casa, dejarles preparada alguna comida especial acorde con su dieta y los posibles problemas de salud que pueda tener. Pequeñas acciones y muestras de afecto que hacen que se ilusionen y sobre todo se vean atendidos.


 Además, la idea de ver a sus nietos quienes los tienen, les entusiasma. El beso de un nieto, el contarle recuerdos del pasado y las historias que vivió, les gusta, pues son personas con mucha vida y de quienes se puede aprender, fomentando por tanto la estima y valía de los más mayores.

Aunque por suerte muchas personas tengan naturalizada la muerte, también es conveniente que no se les recuerde cada por tres que son mayores, que la muerte está cerca y que igual al año que viene ya no estarán con nosotros. Esto lo único que puede generarles es más tristeza y que puedan pensar que ya no vale la pena hacer otras cosas diferentes (acordes a su estado físico por supuesto).

Como podéis ver, todos los ejemplos que os hemos ofrecido, aparte de ayudarles a no sentirse solos, contribuyen a que los más mayores:

·       No pierdan referencias temporales: el hablar con alguien, el saber que es Navidad, el salir a comer fuera cada sábado, etc. les reorienta en el tiempo y les ayuda a situarse.

·       No se descuiden: saber que van sus nietos e hijos a visitarles, o que han quedado con un amigo del pasado, les ayuda a cuidar su higiene y a no llevar una dieta monótona y fácil (para muchos mayores es muy recurrente cenar leche con galletas, pero esa cena casi a diario no es saludable).

Para finalizar y a modo de resumen, sabemos que muchos de nuestros mayores, ya no aguantan las cenas de Nochebuena, Fin de Año, etc. reuniones y comilonas que son de larga duración y muy intensas. Nuestros mayores necesitan su rutina y no salirse de ella, y de eso son conscientes ellos mismos. Pero simplemente con que recordemos a esa persona que la queremos, con pequeños actos y palabras, y lo sienta, generaremos en ella ilusión y la ayudaremos a vivir su día a día con algo más de alegría.Párrafo nuevo

De: Magazine Spain Psicologia Clave





El Duelo en la Vejez

Características y dificultades


Hoy en día, la esperanza de vida cada vez se alarga más. Esto tiene como consecuencia que, a menudo, personas de muy avanzada edad deben afrontar procesos de duelo por el fallecimiento de su cónyuge -con el que quizá han llegado a convivir durante más de 50 años- o incluso de sus hijos o nietos.


La experiencia de la pérdida tiene características propias según la etapa vital en la que se presenta. En el artículo de hoy profundizaremos en los determinantes que influyen en el duelo que tiene lugar durante la vejez.

Superar el duelo en la tercera edad

En contra de algunas creencias socialmente extendidas, la mayoría de los ancianos son capaces de ajustarse al duelo y adaptarse a la viudez. En general, las personas de edad avanzada han tenido que afrontar múltiples pérdidas a lo largo de su vida y eso puede ayudarles a afrontar duelos posteriores.

El bagaje vital acumulado, repleto de experiencias, aporta una forma de ser y de estar frente a la vida que será determinante en la manera de afrontar y elaborar una crisis tan profunda como es el duelo. Por este motivo, la forma en que una persona mayor ha ido afrontando los diferentes retos de su vida será el factor que le predisponga hacia la resolución satisfactoria del duelo sin necesidad de ayuda, o bien hacia una complicación del mismo.

El duelo complicado en la vejez

A través de nuestra práctica clínica, observamos que el duelo complicado en los ancianos a menudo se da tras el fallecimiento del cónyuge. Esta pérdida puede suponer en muchos casos el abandono de la ilusión de futuro, de vida y de proyecto. Cuando el duelo se complica en ancianos, es frecuente que se instale la tristeza constante, la ansiedad… reforzando aún más esa sensación de desorientación vital y de descontrol.

Generalmente este duelo se alarga mucho en el tiempo y se manifiestan ideas rígidas acerca de la muerte, del futuro, de la vida en general, de la poca capacidad para afrontarlo. Suelen aparecer sentimientos de culpa por continuar viviendo, especialmente si el fallecido es un nieto joven o un hijo. Pero, incluso cuando es el cónyuge el que fallece, la culpa suele aparecer, aumentando el dolor. Además, el anciano en duelo se enfrenta a la sensación de soledad y de inseguridad.

La atención terapéutica del duelo complicado

A las generaciones de nuestros abuelos se les inculcó la no expresión de las emociones como rasgo de fortaleza, así como no pedir ayuda y mucho menos a acudir a un psicólogo. Sin embargo, el hecho de intentar mantener las emociones que conlleva el duelo bajo control constante complica su elaboración.

En lo relativo al tratamiento del duelo en personas mayores, es importante localizar dónde hay un bloqueo, en qué tarea del duelo se ha quedado estancado el paciente. Además, resulta fundamental fijar junto al doliente un objetivo realista y acorde con la persona. No se puede forzar al paciente a conseguir metas cuando decide que ése es su camino.

El duelo se puede elaborar, pero debemos atender y respetar cada caso individual y marcar los objetivos terapéuticos dentro del marco de referencia de la persona que atendemos, olvidándonos de las generalidades o de los supuestos.

Evitar la sobreprotección del anciano

En general suele darse una tendencia a infantilizar al anciano y, por lo tanto, a subestimar las capacidades y recursos internos con los que puede afrontar la elaboración de su duelo y adaptarse a la viudez. Desde esta visión de la persona mayor, el entorno puede actuar sobreprotegiendo a la persona y, así, bloquear su proceso al negarle la oportunidad de poner en marcha sus recursos.

Otra idea errónea que está extendida socialmente -y que puede contribuir a complicar el proceso- es que las personas mayores no superan los duelos. Esta idea deja a la persona indefensa y paralizada frente al proceso.

Todas estas claves pretenden servir de orientación a las personas que han sufrido la pérdida de un ser querido o intentan ayudar a una persona doliente de su entorno. Para saber más o para solicitar ayuda gratuita, no dude en consultar nuestra página web:

www. fundacionmlc.org

de PILAR PASTOR, PSICÓLOGA DE FMLC


5 juegos para estimular la psicomotricidad en ancianos


Llegar a la tercera edad implica cambios físicos, cognitivos, emocionales y sociales que pueden abordarse de una manera más adecuada con hábitos saludables, alimentación, ejercicios adaptados a su edad y juegos para estimular su psicomotricidad y memoria.

Hoy en día, la terapia ocupacional propone programas para disminuir el impacto del deterioro físico y cognitivo desde varias disciplinas. Uno de ellos, busca fortalecer la psicomotricidad en ancianos, en sus capacidades físicas, psicológicas y afectivas.

Estos juegos pueden realizarse desde la comodidad de la casa bajo supervisión si es requerida.


Bailar 


El ejercicio físico del baile incentiva el control motriz al tratar de seguir el ritmo de la música. También fortalece la propia percepción y autoestima de la persona mayor.

Esta actividad se puede hacer durante una hora en su tiempo de esparcimiento, mientras el auxiliar de ayuda doméstica se encarga de las actividades del hogar.

Entre sus beneficios físicos del baile se incluyen.

  • Dar mayor resistencia a los sistemas respiratorio y cardiovascular.
  • Entrenar las funciones cerebrales.
  • Mejorar la flexibilidad y resistencia.
  • Trabajar la coordinación y equilibrio.
  • Fortalecer los músculos.
  • Prevenir la osteoporosis.

Otra ventaja es la practicidad de hacerlo, ya que no requiere llevar a la persona al gimnasio o a una clase. Solamente se necesita colocar música y empezar a bailar.


Compartir con una mascota


Hoy en día, se denomina terapia asistida con mascota a la visita de 15 minutos que realiza un entrenador con su perro en los hospitales o en los centros geriátricos. En esas sesiones, los pacientes los acarician y se sienten más relajados. Por supuesto, para hacerlo deben cumplirse con las medidas de higiene y seguridad pertinentes.

En el caso de los ancianos con mascotas, estos pueden hacer tareas más fáciles de cuidado, cepillar su cabello, darles de comer, darles cariño, etc.

Entre los aspectos positivos de esta práctica se encuentran.

  • Ofrecer esparcimiento y consuelo a los pacientes de las casas de reposo.
  • Afrontar de mejor manera los dolores en enfermedades cardiovasculares, cáncer y trastornos mentales.
  • Promover la actitud positiva en el envejecimiento.


Practicar ejercicios suaves de gimnasia


Las personas mayores de 65 años pueden ejercitarse para aprovechar los beneficios para su salud y abordar de forma positiva los cambios propios de la edad. Incluso para las personas que sufren de cardiopatías, artritis, diabetes e hipertensión arterial, el envejecimiento activo les ayuda a disminuir los síntomas.

Por supuesto, la complejidad del ejercicio depende de su condición física.

Algunos ejercicios simples pueden ser elevar las extremidades, rotar las articulaciones y subir y bajar las escaleras para fortalecer la flexibilidad y la coordinación motora, mientras otros desarrollan la fuerza, flexibilidad y equilibrio de las personas mayores. Su intensidad y frecuencia depende de su condición física.

En caso de haber pasado mucho tiempo en reposo, es recomendable empezar con sesiones cortas y aumentar a medida que se obtiene resistencia.

  • Nadar.
  • Salir a caminar.
  • Subir las escaleras.
  • Jugar baloncesto.
  • Cortar el césped.
  • Levantar pesas.
  • Bailar.
  • Correr.
  • Montar en bicicleta.
  • Hacer yoga y ejercicios de meditación.
  • Pararse sobre un pie.
  • Realizar ejercicios de estiramiento.
  • Utilizar bandas elásticas.

La gimnasia adaptada a personas mayores tiene estos efectos positivos.

  • Entrenar las funciones cognitivas.
  • Ayudar a recuperar la independencia física a través de la flexibilidad y la fuerza.
  • Mejorar el sentido del humor.
  • Fortalecer el equilibrio para evitar caídas.
  • Sentirse con más energía.
  • Evitar el desarrollo de enfermedades o reducir sus síntomas en caso de tenerlas.
  • Prevenir la depresión.

 

Manualidades 


Las actividades manuales son muy positivas para la salud de los adultos porque fortalecen sus capacidades mentales, memoria, concentración, coordinación y promueven el intercambio social con sus pares, con quienes las realizan.

A su vez, la percepción de los tamaños, formas, colores y texturas incentivan la actividad cerebral como estímulo para sus sentidos. Cuando terminan sus creaciones artísticas, se sienten felices consigo mismos y valiosos al obsequiarlas a sus familiares.

Las manualidades son muy variadas, por lo que no hay riesgo de aburrirse o sentirse ansiosos.

  • Crear origamis.
  • Bordar.
  • Realizar figuras con plastilina o arcilla.
  • Colorear mandalas.
  • Hacer punto de cruz.
  • Escribir un diario.
  • Tallar figuras de madera.
  • Hacer portarretratos o álbumes de fotos.
  • Crear tarjetas de navidad para regalar.
  • Realizar bisutería.
  • Hacer flores con cartón.

 

Juegos de mesa


Los juegos de mesa ofrecen un sinfín de ventajas físicas y psicológicas para las personas de la tercera edad y también les ayudan a gestionar sus emociones de una manera más saludable. Específicamente, estos son sus beneficios.

  • Integrar a las personas mayores a la dinámica de los más jóvenes.
  • Recuperar la creatividad y la imaginación de la infancia.
  • Desarrollar la destreza física y agilidad mental.
  • Promover la cooperación y el trabajo en equipo.
  • Hablar sobre las experiencias vividas en el juego.
  • Construir nuevos recuerdos.

Ajedrez, monopoly, parchís, memoria, crucigramas, barajas, sudoku o bingo son los juegos más comunes, no obstante, se pueden adaptar otros que les gusten más.

 

Tomado de sadacv.es


Cambios de comportamiento

¿Cómo reaccionar?

Conforme nos vamos haciendo mayores nuestros hábitos y costumbres cambian, al igual que nuestro comportamiento.

Al convivir con personas mayores debemos estar preparados para presenciar, afrontar e incluso acompañarles en todos los cambios de comportamiento…


Es importante no juzgarle en vano, él o ella no tiene por qué tener la culpa de estos cambios de comportamiento. Recordemos siempre que un comportamiento puede ser consciente o inconsciente, voluntario o involuntario, público u oculto, en función del contexto y circunstancias en las que se dé.

“Los comportamientos pueden ser conscientes o inconscientes, voluntarios o involuntarios y públicos u ocultos”

Es lógico que una nueva etapa vital conlleve unos cambios de comportamiento en los ancianos, se trata de la adaptación a la vejez. La adaptación al medio es un impulso básico que se da en todas las etapas. La tercera edad no es ninguna excepción, eso sí, posiblemente será la adaptación más complicada. Al tratarse de la última etapa de la vida supone un medio bastante hostil en el que las capacidades personales se van reduciendo paulatinamente, dando paso a diversas demencias como puede ser el Alzheimer.

Para ello, la Alzheimer’s Association ha elaborado una lista de 10 síntomas del Alzheimer y otras demencias. Conocerlas nos ayudará a comprender mejor a nuestros ancianos y acompañarlos en estos cambios de comportamiento.


Pérdidas de memoria

Posiblemente éste sea el síntoma más común en las demencias de la tercera edad. Se olvida la información recién aprendida, las fechas importantes, se pregunta por lo mismo en reiteradas ocasiones… Como familiares o cuidadores debemos servir al anciano como recordatorio constante de aquello que ha olvidado, manteniendo siempre la paciencia y repitiendo la información tanto como sea preciso.

“Olvidar lo recién aprendido pero recordar lo que sucedió hace 50 años suele ser un síntoma común en la tercera edad”


Dificultad para resolver problemas

También se suele dar una pérdida de las habilidades de planificación y cálculo. Tareas que hasta ahora resultaban sencillas como sumar o restar en el supermercado o seguir una receta de cocina paso a paso pueden convertirse en un auténtico reto.


Dificultad para desempeñar tareas cotidianas

Con la aparición del Alzheimer y demás demencias similares el anciano pierde la capacidad de realizar algunas tareas cotidianas. Quizás olvidó las reglas de aquel juego de cartas o ya no sabe cómo encender el horno, por lo que el rol del cuidador adquiere un valor incalculable para él.


Desorientación de tiempo y lugar

Otro signo propio del Alzheimer es la desubicación temporal y espacial. El anciano pierde la noción del tiempo y no sabe con certeza en qué día de la semana o estación del año está. Lo mismo sucede con el espacio, olvidándose de donde se encuentran o cómo llegaron hasta ese punto.


Problemas en la vista

En algunos casos la vista también se suele ver afectada. Grandes dificultades para leer, incapacidad para calcular distancias o identificar colores… son algunos de los problemas visuales que pueden derivar del Alzheimer. Es importante identificar estos cambios a tiempo para abandonar ciertos hábitos como la conducción, que podrían resultar peligrosos.

Problemas con el lenguaje

También se pueden desarrollar dificultades en la expresión oral y escrita. Puede ser que el anciano pierda la capacidad de desarrollar un discurso coherente de principio a fin, quedándose en blanco en medio de una conversación o repitiendo constantemente la misma idea. También puede darse una dificultad en la búsqueda de las palabras adecuadas, limitando notablemente su vocabulario y capacidad expresiva.

“Las demencias de la tercera edad suelen reducir la capacidad expresiva del individuo. Repitiendo siempre la misma idea o no pudiendo dar con la palabra exacta”

Extraviar objetos

Otro síntoma recurrente es el de mover las cosas de sitio. Cuando utilizan un objeto olvidan colocarlo de nuevo en su sitio. Así que la próxima vez no lo pueden encontrar. Cuando esto sucede ya a menudo, es posible que sospechen que alguien les está robando.


Perdida del juicio

Su capacidad para razonar o fijarse en las cosas importantes también se suele ver disminuida. En este punto puede suceder que no valoren en absoluto la labor de su cuidador o que se olviden de su aseo personal por ejemplo.


Pérdida de iniciativa para actividades sociales

Un enfermo de Alzheimer también suele perder la iniciativa para participar en sus actividades sociales y pasatiempos habituales. Es comprensible, puede ser que ya no entienda cómo realizar ese pasatiempo o que no sepa cómo relacionarse con aquellos amigos. Los cambios internos que está experimentando suelen conducirle a un aislamiento inevitable. Como cuidador es importante tratar de mantenerlo animado y con motivación hacia sus aficiones e intereses.


Cambios de humor y personalidad

Era de esperar que todos estos cambios condujesen a un más que probable cambio de personalidad. El anciano puede encontrarse desorientado, incomprendido, deprimido, aislado, enfadado, pesimista, desagradecido… Esto puede conducir a cambios drásticos de humor que afectarán directamente a su entorno.


Como cuidador recuerda que nuestra labor dista del mero cuidado físico, debemos comprender estos cambios internos de la persona mayor y acompañarlo a lo largo del proceso. Por mucho que en ocasiones no se nos muestre gratitud o valoración alguna por su parte, recuerda: él o ella nos necesitan más que nunca.


De: El rincón del cuidador (WEB)


LOS 4 CAMBIOS PSICOLOGICOS EN LA VEJEZ

(Memoria, Atención, Inteligencia, Creatividad)

La tercera edad no solo comporta cambios físicos, sino que el modo de pensar también evoluciona.

La mayoría de personas piensan que la vejez es una etapa caracterizada por el declive en todas las funciones del organismo, incluyendo las de tipo cognitivo. No obstante, la investigación revela que los cambios psicológicos en la memoria, la inteligencia, la atención o la creatividad propios del envejecimiento no patológico son menores de lo que creemos.


Cambios psicológicos que se dan en la vejez

Durante la edad avanzada tienen lugar cambios en la mayor parte de funciones y procesos psicológicos. No obstante, a modo general podemos afirmar que estos cambios no se producen de forma equivalente en todas las personas, sino que se ven influidos de forma clave por factores como la salud física, la genética o el nivel de actividad intelectual y social.

Nos focalizaremos en el análisis del desarrollo durante la tercera edad de cuatro de los aspectos psicológicos más estudiados en este campo: las capacidades atencionales, los distintos componentes de la memoria, la inteligencia (tanto la fluida como la cristalizada) y la creatividad.


1. Atención

Si bien se ha identificado de forma clara un declive en el funcionamiento de los procesos atencionales a lo largo de la vejez, estos cambios no se dan por igual en todos los tipos de atención. Para entender el deterioro propio de esta etapa vital es necesario describir en qué consisten la atención sostenida, la dividida y la selectiva.

Hablamos de atención sostenida cuando una tarea requiere que mantengamos el foco atencional fijo en un mismo estímulo durante un periodo de tiempo relativamente prolongado. Las personas mayores son menos precisas al iniciar las tareas, pero su grado de acierto no se reduce más que el de los jóvenes a medida que pasa el tiempo.

En cambio, resulta mucho más marcado el deterioro de la atención dividida, consistente en alternar el foco atencional entre distintas fuentes estimulares o tareas. El grado de eficacia es más bajo cuanto mayor sea la dificultad y el número de las tareas a través de las cuales se evalúe este tipo de atención.

La atención selectiva nos permite atender de forma prioritaria a determinados componentes estimulares, por encima de otras experiencias perceptivas menos relevantes. Las diferencias entre personas jóvenes y mayores sólo aparecen cuando las tareas son difíciles y cuando es necesario ignorar una cantidad importante de información irrelevante.

 

2. Memoria

La memoria sensorial, el más inmediato de los almacenes de memoria, muestra generalmente un declive ligero como consecuencia del envejecimiento. La memoria a corto plazo de tipo pasivo no parece verse afectada por la edad excepto por un pequeño descenso en la velocidad de recuperación de la información.

Por contra, diversos estudios longitudinales revelan que la memoria operativa o de trabajo sí empeora a lo largo de la vejez, en especial a partir de los 70 años. Esto se asocia a las dificultades para manejar los procesos atencionales que hemos descrito en el apartado anterior.

En cuanto a la memoria a largo plazo, cuando el material es de tipo procedimental o declarativo no se producen déficits asociados a la vejez. En cambio, los recuerdos episódicos o autobiográficos se deterioran claramente a medida que la edad avanza, si bien los de la segunda década de vida se mantienen más que los del resto.

De forma resumida, podemos afirmar que el deterioro de la memoria no se asocia a la vejez de forma directa sino a través de la aparición de déficits cognitivos de intensidad patológica, lo cual no sucede en todas las personas. Por otra parte, cuando los problemas de memoria son ligeros resulta relativamente sencillo compensarlos con estrategias conductuales.


3. Inteligencia

A pesar de que se han encontrado diferencias en la inteligencia en función de la edad, éstas son diferentes en función de si se investigan de forma transversal (comparando dos grupos de edades diferentes en un mismo momento temporal) o longitudinal (a lo largo del tiempo en los mismos individuos). Otro aspecto clave es la distinción entre inteligencia fluida y cristalizada.

La inteligencia cristalizada, que hace referencia al conocimiento acumulado y a su manejo, no deja de aumentar a lo largo de la vida, excepto si se padece un trastorno amnésico. En cambio la inteligencia fluida, asociada a la eficiencia de la transmisión neuronal y otros factores biológicos, muestra un deterioro intenso al menos desde los 70 años.

En este sentido cabe hacer una mención especial al fenómeno de la pérdida terminal, que consiste en un deterioro muy intenso en las puntuaciones de CI en los últimos 5-10 meses de vida a causa del declive físico. Como el resto de déficits intelectuales derivados de la vejez, la pérdida terminal se asocia en mayor medida a la inteligencia fluida que a la cristalizada.


4. Creatividad

La creatividad se define como la capacidad humana para generar ideas nuevas y soluciones originales a través de la asociación entre contenidos mentales ya existentes. En psicología se suele usar el concepto de “pensamiento divergente” o “lateral” para hacer referencia a esta capacidad, en oposición al pensamiento convergente o vertical, basado en la lógica.

Aunque las investigaciones en torno a la evolución de la creatividad en función de la edad son escasas, sus resultados sugieren que se mantiene e incluso mejora con el paso del tiempo en las personas que la ejercitan. No obstante, entre quienes no son especialmente creativas tal capacidad es inferior en la vejez que en edades más tempranas.


De: Psicologiaymente.com (Alex Figueroa)

Alzheimer

La demencia es un desorden cerebral que afecta seriamente la habilidad de una persona para llevar a cabo sus actividades diarias. La enfermedad de Alzheimer (AD por sus siglas en Inglés) es la forma más común de demencia entre las personas mayores. Involucra las partes del cerebro que controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje.

Cada día los científicos aprenden más sobre esta enfermedad, pero hasta ahora sus causas son desconocidas y no se conoce ninguna cura.


Los científicos creen que aproximadamente 4 millones de estadounidenses padecen de la enfermedad, normalmente se manifiesta después de los 60 años y el riesgo aumenta con la edad. Aunque las personas más jóvenes también pueden sufrirla, es mucho menos común entre ellas. Aproximadamente el 3 por ciento de hombres y mujeres entre los 65 y los 74 años la tienen, y casi la mitad de los hombres y mujeres de 85 años y más pueden tenerla. Es importante anotar sin embargo, que la enfermedad de Alzheimer no es una etapa normal del envejecimiento.


La enfermedad de Alzheimer es llamada así por el médico alemán Alois Alzheimer, quien en 1906 notó cambios en el tejido cerebral de una mujer que había muerto de una rara enfermedad mental. Alzheimer encontró aglutinaciones anormales (ahora llamadas "placas de amiloide") y una masa confusa de fibras (ahora llamada "enredo de neurofibrillas"). Actualmente estas placas y enredos en el cerebro son considerados el sello característico de la enfermedad de Alzheimer.


Los científicos también han encontrado otros cambios en el cerebro de las personas que tienen la enfermedad de Alzheimer. Hay una pérdida de células nerviosas en áreas del cerebro que son vitales para la memoria y otras habilidades mentales. También hay disminución en el nivel de los químicos del cerebro responsables de la transmisión de mensajes complejos entre las células nerviosas. Puede alterar los procesos normales de pensamiento y de memoria debido al bloqueo de estos mensajes entre las células nerviosas.

¿Cuáles son las causas de la enfermedad de Alzheimer?

Los científicos no entienden aún completamente qué causa la enfermedad de Alzheimer.

Probablemente no hay una sola causa, sino existen varios factores que afectan a cada persona de diferente manera.

La edad es el factor de riesgo conocido más importante de la enfermedad de Alzheimer. El número de personas que la sufren se duplica cada 5 años entre las personas mayores de 65 años.



La historia familiar es otro factor de riesgo. Los científicos creen que la genética puede jugar un papel importante en muchos casos de esta enfermedad. Por ejemplo, la enfermedad de Alzheimer familiar, una rara forma de Alzheimer que normalmente se manifiesta en personas entre los 30 y los 60 años de edad, puede ser hereditaria. Sin embargo, en la forma más común del Alzheimer que se presenta a edad más avanzada, no se observa ningún patrón familiar

obvio.


Un factor de riesgo para este tipo de Alzheimer es una proteína llamada apolipoproteína E (apoE). Todos tenemos "apoE" que ayuda a transportar el colesterol en la sangre. El gen de la "apoE" tiene tres formas: una parece proteger a una persona de la enfermedad de Alzheimer, y otra parece que aumenta las probabilidades del desarrollo de la enfermedad en la persona. Otros genes que aumentan el riesgo de la enfermedad de Alzheimer o que probablemente protejan contra esta, todavía no se han descubierto.

Los científicos aún necesitan aprender mucho más sobre las causas de la enfermedad de Alzheimer. Adicionalmente a la genética y a la "apoE", están analizando la educación, la dieta, el ambiente, y los virus para investigar qué papel pueden tener estos en el desarrollo de esta enfermedad.

¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad de Alzheimer?

La enfermedad de Alzheimer comienza lentamente. Al principio el único síntoma puede ser tener pequeños olvidos.

Las personas con la enfermedad de Alzheimer pueden tener problemas para recordar eventos recientes, actividades o los nombres de personas o cosas familiares. Las operaciones simples de matemáticas pueden volverse difíciles de resolver. Estas dificultades pueden causarle fastidio, pero normalmente no son tan serias como para causar alarma.

Sin embargo, mientras la enfermedad progresa, los síntomas se notan más fácilmente y se acentúan tanto que son motivo suficiente, para que la persona con la enfermedad de Alzheimer o los miembros de su familia, busquen ayuda médica. Por ejemplo, las personas en la etapa avanzada del Alzheimer pueden olvidar la forma de hacer tareas sencillas, como cepillarse los dientes o peinarse. Ya no pueden pensar claramente y empiezan a tener problemas para hablar, entender, leer o escribir. Después, las personas con la enfermedad de Alzheimer pueden ponerse ansiosas o agresivas, o deambular fuera de la casa. Eventualmente los pacientes necesitan un cuidado permanente.

¿Cómo se trata la enfermedad de Alzheimer?

La enfermedad de Alzheimer es una enfermedad lenta, que comienza con leves problemas de memoria y termina con un severo daño cerebral. El curso que toma la enfermedad y la velocidad en que ocurren los cambios varían de persona a persona. En promedio, los pacientes con la enfermedad viven entre 8 y 10 años después de que se les ha diagnosticado, aunque esta puede durar hasta 20 años.


Ningún tratamiento puede detener la enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, en algunas personas, en las fases temprana y media de la enfermedad, medicamentos como el tacrine (Cognex), donepezil (Aricept), rivastigmine (Exelon) o galantamine (Reminyl) pueden prevenir el empeoramiento de algunos síntomas durante un tiempo limitado. También algunas medicinas pueden ayudar a controlar conductas sintomáticas de la enfermedad de Alzheimer como el insomnio, la agitación, el deambular, la ansiedad y la depresión. El tratamiento de estos síntomas frecuentemente hace que los pacientes se sientan más cómodos y facilita su cuidado para las personas que los atienden.


El desarrollo de nuevos tratamientos para la enfermedad de Alzheimer es un campo activo de investigación. Los científicos están sometiendo a prueba varios medicamentos para ver si previenen la enfermedad de Alzheimer, para hacer más lenta su evolución o para ayudar a reducir los síntomas de la conducta.


Los científicos han sometido a prueba dos tipos diferentes de medicamentos anti-inflamatorios sin esteróides (NSAIDs por su sigla en Inglés) para averiguar si retardan la evolución de la enfermedad. Hay evidencia que la inflamación en el cerebro puede contribuir al daño de la enfermedad de Alzheimer. Los científicos creen que los medicamentos anti-inflamatorios como los NSAIDs podrían ayudar a retardar el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. El rofecoxib (Vioxx) y el naproxen (Aleve) son actualmente dos NSAIDs en estudio.


Las investigaciones han demostrado que la vitamina E retarda el avance de algunas de las consecuencias de la enfermedad de Alzheimer por aproximadamente 7 meses. Actualmente los científicos están estudiando la vitamina E para saber si esta puede prevenir o retardar la enfermedad de Alzheimer en los pacientes con MCI.


Recientes investigaciones sugieren que la ginkgo biloba, un extracto hecho de las hojas del árbol de ginkgo, puede ser de alguna ayuda en el tratamiento de los síntomas de la enfermedad de Alzheimer. No hay evidencia de que la ginkgo pueda curar o prevenir esta enfermedad. Los científicos están intentando ahora averiguar si la ginkgo biloba

puede retardar o prevenir la demencia en las personas mayores.


Hay investigaciones también en marcha para ver si el estrógeno reduce el riesgo de la enfermedad de Alzheimer o retarda su desarrollo. Un estudio demostró que el estrógeno no retarda la progresión de la enfermedad ya diagnosticada, pero se necesita investigar más para averiguar si puede jugar otro papel. Por ejemplo, los científicos

están ahora intentando averiguar si el estrógeno puede prevenir la enfermedad de Alzheimer en mujeres con historia familiar de la misma.


Las personas con enfermedad de Alzheimer y con MCI que quieran ayudar a los científicos a probar los posibles tratamientos pueden participar en las pruebas clínicas. Las pruebas clínicas son estudios que se realizan para averiguar si un nuevo tratamiento es seguro y efectivo. Las personas saludables también pueden ayudar a los científicos a aprender más sobre el cerebro y la enfermedad de Alzheimer. El Instituto Nacional sobre el Envejecimiento y la Administración Federal de Drogas y Alimentos (FDA por su sigla en Inglés) están trabajando

conjuntamente para mantener una base de datos de las pruebas clínicas de la enfermedad de Alzheimer, con la relación de las pruebas patrocinadas por el gobierno federal y las compañías privadas. Para obtener más información sobre estos estudios, comuníquese con el Centro de Información y Referencia sobre la Enfermedad de Alzheimer de NIA (ADEAR) en la línea bilingüe gratuita 1-800-438-4380, o visite la página electrónica del Centro ADEAR en: http://www.alzheimers.org (información en inglés). Usted puede revisar regularmente para ver qué

nuevas pruebas clínicas se han agregado a la base de datos.


Muchos de estos estudios se están realizando en los Centros sobre la Enfermedad de Alzheimer patrocinados por NIA localizados a lo largo de los Estados Unidos. Estos centros están realizando una amplia gama de investigaciones, que incluye estudios sobre las causas de la enfermedad de Alzheimer, su diagnóstico, tratamiento y manejo. Para obtener una lista de estos centros, comuníquese con el Centro ADEAR.

¿Hay ayuda para las personas que atienden a los enfermos?

Frecuentemente los cónyuges u otros miembros de la familia proveen el cuidado diario de las personas con la enfermedad de Alzheimer. Cuando la enfermedad avanza, los pacientes necesitan cada vez más cuidados. Esto puede ser difícil para las personas dedicadas a estos cuidados y puede afectarles su salud física y mental, la vida familiar, el trabajo y sus finanzas.


La Asociación de Alzheimer tiene centros de asistencia en todo el país que proporcionan programas educativos y grupos de apoyo para las personas dedicadas a estos cuidados y para los miembros de la familia de las personas que sufren de la enfermedad de Alzheimer. Para mayor información póngase en contacto con la Asociación de Alzheimer información la cual se incluye al final de este folleto.

​​​​​​​Investigación

Los científicos han avanzado mucho en la comprensión de la enfermedad de Alzheimer. Los resultados de años de investigación han empezado a aclarar la diferencia entre los cambios normales de la memoria relacionados con la edad, el MCI y la enfermedad de Alzheimer. Los científicos también han hecho grandes progresos en la definición de los cambios que se presentan en el cerebro del enfermo de Alzheimer lo cual les permite identificar con precisión los posibles objetivos del tratamiento. Estos adelantos son la base para la Iniciativa para la Prevención de la Enfermedad de Alzheimer de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) que está diseñada

para:

·entender por qué la enfermedad de Alzheimer se presenta y quién está en mayor riesgo de desarrollarla

·mejorar la exactitud del diagnóstico y la habilidad para identificar a aquéllos en riesgo

·descubrir, desarrollar y probar nuevos tratamientos

·descubrir tratamientos para los problemas de conducta de los pacientes con la enfermedad de Alzheimer

Alzheimer's Association

Asociación de Alzheimer

Suite 1100

919 North Michigan Avenue

Chicago, IL 60611-1676

1-800-272-3900

Página electrónica: http://www.alz.org

Artritis Reumatoide

Interesante artículo que nos da una idea de cómo es esta enfermedad

¿QUE ES LA ARTRITIS REUMATOIDE?

Es una enfermedad en la que se inflaman las articulaciones produciéndose dolor y dificultad para el movimiento.

Además se pueden lesionar otras partes del organismo. Tiene una duración variable, irregular y en general larga, por lo que se dice que es una enfermedad crónica. Las molestias y limitaciones que la artritis reumatoide ocasiona varían mucho de un enfermo a otro, de manera que no hay dos enfermos iguales. La artritis reumatoide es una enfermedad frecuente ya que una de cada 100-300 personas la padece (130.000 a 400.000 en España). Sin embargo no hay que confundir la artritis reumatoide con el "reuma". La artritis reumatoide es una de las más de 200 enfermedades reumáticas diferentes. Por este motivo los consejos de amigos o vecinos que tienen "reuma" pueden no estar indicados o incluso ser contraproducentes. Es una enfermedad que se da con más frecuencia en mujeres, pero que afecta también a varones. No es una enfermedad propia de la edad avanzada y aunque puede aparecer en ancianos, se presenta con mayor frecuencia de los 45 a los 55 años. También puede afectar a niños.

LA ARTRITIS REUMATOIDE EN LAS ARTICULACIONES

Las articulaciones son las estructuras que unen los huesos entre. sí y permiten la movilidad del cuerpo humano. Las porciones finales de los huesos están recubiertas por unas superficies lisas que son los cartílagos, lo cual permite un rozamiento suave entre dichos huesos.

Con el fin de alimentar, proteger y cubrir estos cartílagos, las articulaciones disponen de una membrana que las recubre saltando de un hueso a otro y que se llama membrana sinovial. La artritis reumatoide es una enfermedad en la que se produce la inflamación de la membrana sinovial de múltiples articulaciones. La inflamación de la membrana sinovial va a ser la responsable del dolor, de la hinchazón que con frecuencia se observa y de la sensación de rigidez que se puede notar por las mañanas. Unas articulaciones se afectan más que otras, y hay algunas que casi nunca se alteran. La persistencia de la inflamación de la membrana sinovial lleva consigo que ésta dañe al hueso en el lugar en que se fija al mismo, dando lugar a pequeñas muescas (erosiones). Además, la inflamación mantenida o frecuente de una articulación puede hacer que el cartílago que permite el rozamiento suave entre los huesos adelgace y desaparezca. Con el tratamiento se puede conseguir que la inflamación de la membrana sinovial se controle, pero el daño ya producido en el hueso y en los cartílagos es irreparable. La sobrecarga de las articulaciones inflamadas contribuye a acelerar su destrucción. Para que el daño irreparable sea el menor posible, es imprescindible que el médico conozca la realidad diaria del enfermo, y que el paciente colabore en el tratamiento siguiendo las medidas que se especificarán más adelante.

La artritis reumatoide fuera de las articulaciones

Aunque la localización fundamental de las lesiones producidas por la artritis reumatoide está en la membrana sinovial de las articulaciones, a veces se pueden alterar otras estructuras. En la piel pueden encontrarse los llamados nódulos reumatoides que son abultamientos duros (nódulos) que aparecen en zonas de roce, como son los codos, el dorso de los dedos de las manos y los pies, la parte posterior de la cabeza, la zona del talón...etc. También se pueden localizar en el interior del organismo, aunque raramente producen lesiones de relevancia para la salud.

Estos nódulos son la consecuencia de la actividad de la enfermedad. No tienen nada que ver con el cáncer y no producen un daño irreversible.

Muchas veces se quitan solos con el tratamiento y a veces hay que operar para eliminarlos. Sequedad de la piel y de las mucosas. La artritis reumatoide puede originar inflamación y atrofia de las glándulas que fabrican las lágrimas, la saliva, los jugos digestivos o el flujo vaginal. Cuando esto ocurre se habla del denominado Síndrome de Sjogren asociado a artritis reumatoide. La artritis reumatoide puede producir inflamación u otro tipo de lesión en diversas estructuras del organismo, así como alteraciones en los análisis de sangre y orina, que el reumatólogo vigilará y controlará de forma rutinaria.

¿POR QUÉ SE PRODUCE LA ARTRITIS REUMATOIDE?

La artritis reumatoide se presenta con más frecuencia en personas con una especial predisposición genética, sin embargo no es una enfermedad hereditaria. La causa es desconocida. Se han estudiado agentes infecciosos (bacterias, virus...) y aunque se han encontrado datos sugerentes en algunos casos, no hay evidencias que confirmen la implicación de uno en concreto. La artritis reumatoide no es contagiosa. Se sabe que hay alteraciones del sistema inmunológico o de defensa del organismo. La inflamación que se produce en las articulaciones es la consecuencia de la invasión de la membrana sinovial por células que dañan la articulación. La capacidad de defensa ante las infecciones es prácticamente normal. El clima y la humedad no tienen nada que ver con el desencadenamiento o el mantenimiento de la artritis reumatoide. Sin embargo es cierto que algunos cambios climáticos y en particular cuando el tiempo va a empeorar, hacen que cualquier articulación dañada por ésta o por otra enfermedad sean más dolorosas.

¿QUÉ SINTOMAS DA?

El dolor en las articulaciones grandes y pequeñas del cuerpo es la queja más frecuente en esta enfermedad. Este dolor es la consecuencia de la inflamación de las articulaciones y con frecuencia se puede ver la hinchazón a simple vista. Las articulaciones dañadas con más frecuencia son las de las muñecas, los nudillos, articulaciones de los dedos, los codos, los hombros, las caderas, las rodillas, los tobillos y los dedos de los pies. El dolor de cuello también puede ser debido a artritis reumatoide y debe ser comunicado al médico. Además del dolor y la inflamación y como consecuencia de los mismos, por las mañanas habrá dificultad para el inicio de los movimientos (rigidez matutina) de duración variable, y que a veces puede ser de horas. La inflamación mantenida y no controlada puede acabar dañando los huesos, los ligamentos y los tendones que hay alrededor. La consecuencia será la deformidad progresiva de las articulaciones y la pérdida de la capacidad para hacer algunas tareas de la vida diaria. Otros síntomas poco frecuentes pueden tener que ver con alteraciones de la enfermedad a otros niveles o con efectos poco deseables de los tratamientos que se utilizan. Lo más frecuente es que sean independientes, pero hay que contar al reumatólogo síntomas como: fiebre inexplicable, cansancio fácil, dolor de cuello intenso y persistente, hormigueos en manos o pies, ronquera mantenida sin notar catarro, sensación de falta de aire con los esfuerzos, tos continua, dolor en el pecho o en los costados, sequedad de la boca, enrojecimiento ocular, sensación de arenilla en los ojos, picor vaginal, manchas o bultos en la piel o diarrea continuada.

¿CÓMO SE DIAGNOSTICA?

Para saber si una persona determinada padece artritis reumatoide, el reumatólogo valora los síntomas que se han señalado previamente. Hay sin embargo muchas otras enfermedades reumáticas que pueden producir molestias similares. Por este motivo los hallazgos que se pueden encontrar en las radiografías y algunos estudios analíticos (factor reumatoide) son de gran utilidad para confirmar el diagnóstico. Puede ocurrir que una persona presente dolor e inflamación en las articulaciones durante algún tiempo, y que ni la intensidad de su enfermedad, ni las radiografías ni los análisis permitan al médico hacer con certeza el diagnóstico de una enfermedad reumática inflamatoria

determinada. Muchos de los consejos de este folleto son también válidos en estos casos.

¿CUAL ES EL TRATAMIENTO?

El diagnóstico de artritis reumatoide cambia la vida de una persona, que ha de ajustar aspectos a veces importantes de su actividad cotidiana a la nueva situación. Es preciso adaptarse con naturalidad y confianza. Hay que saber que junto al reumatólogo hay un grupo de profesionales dispuestos a ayudarle. Todos éllos suelen disponer de la experiencia que da el haber ayudado a cientos o miles de personas con esta enfermedad. Es verdad que la artritis reumatoide no tiene en el momento actual un tratamiento curativo, lo que no significa que no exista tratamiento alguno. Es más existen tratamientos que permiten controlar la enfermedad en un porcentaje apreciable de personas.

La mayoría de pacientes con artritis reumatoide pueden mantener un nivel de relación social aceptable. Es importante señalar que la colaboración entre el enfermo y el médico es fundamental para el control de la artritis reumatoide.

MEDIDAS GENERALES

Hay que evitar en lo posible una vida agitada, con gran actividad física o con estrés psíquico. Conviene dormir una media de 8-10 horas nocturnas, y viene bien una siesta de 30 minutos. Es bueno comenzar el día con un buen baño de agua caliente, que contribuirá a disminuir la rigidez o el agarrotamiento articular matutino. Si se puede elegir el trabajo, hay que evitar actividades que precisen esfuerzos físicos, obliguen a estar mucho tiempo de pie, o necesiten de movimientos repetitivos, sobre todo con las manos. Durante la jornada laboral hay que mantener una posición recta en el asiento y evitar permanecer con el cuello o la espalda doblados durante periodos prolongados. En el trabajo doméstico hay que evitar hacer fuerza con las manos. No es bueno retorcer la ropa, abrir tapaderas rosca, presionar con fuerza mangos de cubiertos o fregonas etc. En algunas ortopedias hay utensilios que pueden ser de gran ayuda para las tareas domésticas. No es saludable practicar deportes con contacto físico y en los que sean frecuentes los choques. Montar en bicicleta por un terreno llano y sin riesgo de atropello, es conveniente, así como nadar o pasear. En los periodos de poca inflamación es muy recomendable practicar algún ejercicio físico de forma habitual y sin cansarse. Durante el reposohay que mantener una postura adecuada. Es preciso evitar mantener las articulaciones dobladas. No deben ponerse almohadas debajo de las rodillas. Hay que procurar mantener los brazos y las piernas estirados. Es recomendable poner una tabla bajo el colchón y utilizar una almohada baja. El uso de un zapato adecuado es fundamental. Conviene un zapato elástico pero firme. Es mejor evitar los zapatos de plástico o material sintético. Es saludable llevar sujeto el talón, por lo que se recomiendan zapatos de tipo botín con un refuerzo posterior. La puntera debe ser ancha y el empeine lo suficientemente alto como para que no produzca rozaduras en los dedos. Hay que consultar con el reumatólogo la conveniencia de utilizar alguna plantilla determinada. Asimismo hay que consultar en el caso de que el calzado habitual produzca algún tipo de rozadura.

Excepto en casos excepcionales, no hay ninguna dieta que modifique para nada el curso de la artritis reumatoide. Es evidente que la obesidad supone una carga adicional para las articulaciones de las caderas, de las rodillas y de los pies. Por este motivo es recomendable evitar el sobrepeso o adelgazar según los casos. La dieta típica mediterránea, rica en legumbres, ensaladas, aceite de oliva y pescado puede ser beneficiosa.

La actividad sexual puede verse parcialmente afectada por el deterioro articular. Es conveniente comunicar al médico este problema con el fin de buscar una solución adecuada.

Cuidado de las articulaciones

Una articulación inflamada debe ser mantenida en reposo. No hay que atender a consejos de familiares o amigos animando a mover una articulación inflamada "para evitar que se anquilose". La sobreutilización de una articulación inflamada favorece que se produzcan daños irreversibles en los huesos que forman la articulación en cuestión. Ya habrá tiempo, una vez haya pasado la inflamación, de hacer ejercicios que preserven el movimiento.

Sin embargo, incluso en fases de inflamación articular, es muy conveniente mantener una buena musculatura alrededor de la articulación inflamada, pero sin mover la articulación. Es útil aprender a contraer los músculos que hay alrededor de una determinada zona inflamada. Son los denominados "isométricos". En esencia consisten en poner en tensión los músculos que hay alrededor de las articulaciones, pero sin que éstas se muevan. Mantener contracciones musculares de 20 segundos de duración 10 veces al día proporciona un adecuado tono muscular. La utilización de aparatos que mantienen la posición adecuada de los dedos de las manos (férulas), para uso nocturno, aún siendo algo incómoda inicialmente, previene deformidades futuras.

Tratamiento con medicamentos

Todos los medicamentos que sirven para algo tienen efectos secundarios. Los que se usan para tratar la artritis reumatoide también. Cualquier tratamiento a aplicar lo es en función de considerar que es mayor el beneficio que el riesgo. La opción de un tratamiento en particular por parte del reumatólogo es fruto de una amplia experiencia a nivel mundial. Al final será el enfermo quien decidirá si asume el tratamiento después de disponer de la mayor información posible. El tratamiento de la artritis reumatoide con medicamentos incluye dos grandes grupos de fármacos: Uno de ellos engloba a los que sirven para aliviar el dolor y la inflamación a corto plazo. Son útiles para bajar la inflamación y sobrellevar el dolor del "día a día", pero no sirven para modificar la evolución de la enfermedad a largo plazo. En este grupo entran los llamados anti-inflamatorios y los corticoides. Los anti-inflamatorios son medicamentos eficaces. No hay uno mejor que otros para esta enfermedad. Cada persona puede encontrar uno que le va mejor a ella en particular. Si no mejora de sus síntomas (después de un plazo de un par de semanas) o no tolera el anti-inflamatorio prescrito, hay que consultar al reumatólogo para probar otro. Los corticoides (derivados de la "cortisona") utilizados de forma juiciosa, a dosis moderadas y con unas indicaciones particulares que el reumatólogo conoce, permiten en muchos casos mejorar la calidad de vida a largo plazo, superando a los efectos secundarios que se producen a estas dosis.

El otro gran grupo lo integran medicamentos que no sirven para tratar el dolor en un momento determinado, sino que actúan haciendo que la actividad de la enfermedad a largo plazo sea menor. Tardan en hacer efecto semanas e incluso meses. No son eficaces en el 100% de los enfermos, por lo que es habitual que el médico tenga que prescribir varios de forma secuencial hasta encontrar aquel que sea más eficaz y mejor tolerado. En este grupo entran el metotrexato, las sales de oro, la cloroquina, la sulfasalacina, la D-penicilamina, la azatioprina, la ciclosporina...etc. En general requieren control por parte del reumatólogo y una estrecha colaboración del paciente.

Tratamiento de las articulaciones

Si con el tratamiento prescrito se consigue mejoría del dolor y de la inflamación en general, pero persiste alguna articulación inflamada, hay que hacerlo saber al médico. Una vez descartada alguna complicación, se puede actuar localmente mediante infiltraciones con el fin de bajar la inflamación. El reumatólogo sabe cuándo infiltrar, qué infiltrar y cada cuánto tiempo, para no producir daño, sino todo lo contrario. También es posible actuar localmente sobre articulaciones especialmente inflamadas con material ortopédico especial. Es posible que durante la evolución de la enfermedad, alguna articulación resulte especialmente dañada y sea necesario realizar algún tipo de cirugía reparadora. Llegado el momento oportuno, el reumatólogo informará sobre estas posibilidades de tratamiento.

EMBARAZO. ANTICONCEPTIVOS. CONSEJO GENÉTICO.

Padecer una artritis reumatoide no obliga a evitar el embarazo. Dos tercios de las mujeres con artritis reumatoide experimentan durante el embarazo una mejoría transitoria de la enfermedad, pero conviene recordar que la crianza y el cuidado de un recién nacido exigen un esfuerzo físico considerable que puede aumentar las molestias de la paciente en los meses siguientes al parto. La decisión debe ser el resultado de un juicio meditado. En general se recomienda mantener un intervalo de 4 años entre cada hijo, con el fin de hacer más llevadera la crianza. Si finalmente se decide el embarazo, hay que comunicarlo al reumatólogo a fin de que éste ajuste la medicación de forma que sea lo más segura posible para el feto. Una mujer con artritis reumatoide puede utilizar el método anticonceptivo que considere oportuno su ginecólogo. La artritis reumatoide no es una enfermedad hereditaria. Los familiares en primer grado de un paciente tienen un riesgo aumentado de desarrollar la enfermedad, pero no lo suficientemente importante como para desaconsejar tener descendencia.


LAS "OTRAS MEDICINAS" Aunque parezca mentira, la "medicina oficial" no vuelve la espalda a cualquier medida que puede que ocurre es que si se tiene fe en un tratamiento, sea cual sea, se origina una mejoría parcial de los síntomas. Es lo que se llama "efecto placebo". Por este motivo, para que una medida sea reconocida por los médicos como eficaz, ha de ser mejor que otra que se sepa no sirve para nada (por ejemplo el almidón) en estudios comparativos. Es lo que constituye el método científico. Casi todo lo que las "medicinas alternativas" ofrecen, ha sido ya estudiado en la artritis reumatoide aplicando el método científico. Si se padece una artritis reumatoide y se recurre a este tipo de medidas, puede ocurrir que se pierda un tiempo precioso para controlar el daño de las articulaciones. No hay que dudar en preguntar abiertamente sobre éste o cualquier otro tema al reumatólogo.


Fuente: Sociedad Española de Reumatología

Osteoporosis

Interesante artículo que nos ayuda a entender esta enfermedad

Osteoporosis

La osteoporosis es una enfermedad en la que los huesos se vuelven frágiles y es más probable que se rompan. Si no es prevenida o se deja sin tratar la osteoporosis puede progresar de una manera silenciosa e indolora hasta que algún hueso se rompe (fractura), lo que ocurre con mayor frecuencia en la cadera, columna vertebral y muñeca.


La columna vertebral está formada por una serie de pequeños huesos llamados vértebras. La fractura de estas vértebras puede resultar en disminución de estatura y una posición anormal, generalmente formándose una pequeña giba o joroba. Las fracturas de la cadera pueden limitar la movilidad del individuo y conducir, por lo tanto, a una pérdida de independencia personal. Por otra parte, aunque actualmente la cirugía requerida para corregir estas fracturas de cadera esta muy avanzada, las complicaciones que pueden presentarse en ocasiones llevan a la muerte. Aunque las mujeres desarrollan la enfermedad con una frecuencia cuatro veces mayor que los hombres, también se presenta en varones. Algunos aspectos que es importante conocer acerca del hueso es que se trata de un tejido vivo, en continuo crecimiento o modificación, y no una masa rígida de mineral. A lo largo de nuestra vida el hueso se renueva constantemente a través de un proceso en el que el hueso viejo es removido y reemplazado por el hueso nuevo.


En etapas tempranas de la vida se forma más hueso que el que es removido, alcanzándose la mayor densidad y fuerza ósea entre los 25 y 35 años, edad a partir de la cual el cuerpo remueve el hueso viejo con una velocidad mayor que con la que puede reemplazarlo, con hueso nuevo, conduciendo a una pérdida de la densidad o sea, es decir del contenido mineral del hueso.

Con la menopausia, la mujer experimenta un incremento en la pérdida de hueso por que los ovarios producen menos estrógenos, que es la hormona característicamente femenina y que tiene un papel muy importante en el mantenimiento de densidad de los huesos.

Cuando la pérdida de hueso se vuelve excesiva, loa huesos se hacen cada vez más frágiles y susceptibles de romperse. Podemos decir que, en términos generales, una vez que el hueso se ha perdido no puede ser reemplazado.

¿Está usted en riesgo de desarrollar Osteoporosis?

Existen varios factores que pueden incrementar la probabilidad de que desarrollemos Osteoporosis, que son:

· Herencia caucásica (gente blanca) o asiática.

· Constitución delgada, con huesos pequeños.

· Antecedentes de fracturas o alteraciones posturales en familiares de edad avanzada, especialmente si son mujeres.

· Deficiencia de estrógenos en mujeres que experimentan una menopausia antes de los 45 años, ya sea naturalmente o como resultado de extripación quirúrgica de ovarios.

· Deficiencia de estrógenos como resultado de amenorrea (ausencia anormal de la menstruación, no relacionado con la menopausia).

· Edad avanzada.

· Dieta baja en calcio. Estilo de vida sedentario, con poco o nada de ejercicio

· TABAQUISMO

· Uso excesivo del alcohol

· Uso prolongado de algún medicamento, incluyendo hormonas tiroideas (muchas pastillas o cápsulas misteriosas para bajar de peso las contienen), glucorticoides (derivados de la cortisona) usados para tratar condiciones como el asma, artritis y algunos cánceres; y medicamentos anticonvulsivos (que también se usan para tratar otras enfermedades, como el Epamín o el Fenidantoín).

El descenso en la producción de estrógenos que se da en la menopausia, además que los huesos femeninos son generalmente mas ligeros y delgados, son las razones principales para que osteoporosis afecte más a mujeres que a hombres.

Si bien es cierto que los efectos de la osteoporosis se ven mas frecuentemente en etapas tardías de la vida, todos deberíamos preocuparnos acerca de esta enfermedad. Una nutrición adecuada y hacer ejercicio a lo largo de la vida pueden disminuer dramáticamente el riesgo personal de sufrirla.

COMO PUEDE AFECTAR SU VIDA LA OSTEOPOROSIS

Actualmente los médicos saben más acerca de las causas de osteoporosis y de como prevenir y tratar la enfermedad. Sin embargo aún quedan muchas preguntas por contestar, siendo este motivo de investigación

contínua, así como para encontrar nuevos y mejores tratamientos. Es un hecho indisqutible que la esperanza de vida de la población es cada vez mayor y, como consecuencia lógica, cada vez habrá mas gente afectada por esta enfermedad.

Es importante saber que la fractura de cadera es la consecuencia mas seria de la osteoporosis. Muchas veces la gente que la sufre ya no será capaz de cuidarse o moverse libremente por ella misma. Frecuentemente se ven forzados a ingresar a alguna institución que pueda proporcionarle a largo plazo el cuidado que necesitan; o bien se ven cercanos al tener que depender de ellos. Prácticamente 50,000 gentes mueren cada año, solo en Estados Unidos, como resultado de fracturas de cadera, usualmente a causa de complicaciones ya sea de cirugía o de estar confinados en cama e incapaces de moverse.

Además de dolor y ansiedad, la gente con osteoporosis puede experimentar disminución en su autoestima. Las alteraciones en la postura y la pérdida de estatura no solo cambia la apariencia física, sino como se siente uno respecto a sí mismo.

ALGUNOS HECHOS IMPORTANTES DE LA ENFERMEDAD

25 millones de estadounidenses, principalmente mujeres, están afectados por osteoporosis; sin embargo una encuesta hecha por Gallup a mujeres entre 45 y 75 años indica que tres de cada cuatro de ellas nunca habían hablado con su médico acerca de la osteoporosis.

La osteoporosis lleva a 1.3 millones de fracturas cada año. Una de cada 3 mujeres de 50 años sufrirán alguna fractura vertebral. Las facturas vertebrales pueden provocar que la columna se colapse y conducir a postura anormal y pérdida de estatura.

El riesgo de una mujer de sufrir una fractura de cadera es igual a su riesgo combinado de desarrollar cáncer mamario, uterino y de ovario. Anualmente ocurren más de 250,000 fracturas de cadera por osteoporosis.

Usted, junto con su médico, puede disminuír significativamente el riesgo de sufrir osteoporosis o mejorar si ya la tiene. En México existe la tecnología necesaria para diagnosticar adecuadamente esta enfermedad. Los estudios radiológicos convencionales son inadecuados y poco precisos.

REDUCIENDO SU RIESGO DE OSTEOPOROSIS

Su médico puede hacerle recomendaciones acerca de dieta, ejercicio y medicamentos que pueden ayudarle a conservar fuertes sus huesos conforma va avanzando su edad.

Cómo ayuda el CALCIO.

El calcio juega un papel determinante en el mantenimiento del hueso pero solo no puede prevenir o curar la enfermedad. Es muy importante que forme parte de un programa global de prevención o tratamiento. A pesar de esto y de que en Estados Unidos hay una mucho mayor difusión de información respecto a esto, pesquisas nacionales efectuadas en este país dejan ver buena parte de la población, con más recursos que la de México, no consumen calcio.

Muchas mujeres de hecho consumen menos de la mitad de la cantidad diaria de este nutriente, a saber para adultos:

Hombre y Mujer:

Cantidad equivalente 1000 mg/día. 3 vasos de 240 ml de leche descremada, por ejemplo.

Mujeres Postmenopáusicas:

Que reciben estrógenos 1,000 mg/día. Que no los reciben 1,500 mg/día. 5 vasos de 240 ml de leche descremada, por ejemplo.

Una forma de incrementar la cantidad de calcio en su dieta es comiendo alimentos ricos en calcio, como leche descremada - lo que desminuye su aporte de colesterol - , queso, brócoli, y otros. Si usted no recibe suficiente calcio a través de su alimentación, su médico puede recomendarle un suplemento de calcio adecuado. Es importante que consulte con él cual es el mejor para usted, ya que existen muchas presentaciones en el mercado.

El calcio que se dé como suplemento debe ser fácilmente absorbido en el cuerpo y debe ponerse atención a que contenga la cantidad suficiente de este elemento, generalmente expresado en la etiqueta como calcio elemental.

Algunas personas presentan intolerancia a la lactosa y tienen dificultad para digerir lácteos, por deficiencia de la enzima lactasa, que se necesita para romper el azúcar de la leche (lactosa). La leche fermentada con algunas bacterias (llamadas acidófolas) es bien tolerada, como la que se encuentra en el yoghurt y quesos fuertes. Si usted tiene intolerancia a la lactosa, puede probar con alimentos que contengan esta sustancia, con preparaciones comerciales de lactasa o comprar productos lácteos qu ya han sido tratados.

Obtener suficiente calcio, ya sea a través de la dieta o suplementos, es esencial para mantener fuertes los huesos y puede ser algo crucial para prevenir fracturas relacionadas con la osteoporosis.

El Papel de la Vitamina D

Esta vitamina juega un papel importante en la absorción de calcio y en la salud ósea. La relación entre el calcio y la vitamina D es parecida a la de una puerta cerrada con su llave que la abre, permitiéndole al calcio pasar del intestino a la sangre.

La vitamina D se produce en la piel humana bajo el estímulo de la luz solar. Mientras que mucha gente es capaz de obtener cantidad suficientes en forma natural, se ha demostrado que su producción disminuye en el invierno, así como una gente que permanece dentro de su casa.

Por eso puede ser necesario dar suplementos de este nutriente, pero consumir más de las 400 unidades internacionales (UI) que se recomienda diariamente solo debe hacerse bajo supervisión médica. No se recomiendan grandes dosis de esta vitamina.

El ejercicio y su efecto en el hueso.

Si usted ya tiene osteoporosis, probablemente dude si debería hacer ejercicio o no. La respuesta para la mayoría de la gente es que sí. Es conveniente sin embargo que lo comente con su médico o que lo refieran a un especialista en medicina física para aprender que tipo de ejercicios puede practicar en forma segura; no solo para preservar el hueso sino para fortalecer su espalda y caderas y mantener flexibilidad.

Diagnóstico: el primer paso hacia huesos fuertes.

Usted puede dar pasos AHORA para prevenir huesos rotos DESPUÉS. Previniendo los efectos debilitantes de la pérdida de hueso, usted estará planeando una vida posterior más activa y saludable.

Si ha sufrido una fractura por osteoporosis puede evitar que la pérdida ósea continúe y reducir la posibilidad de fracturas posteriores.

Para determinar su usted tiene osteoporosis o está en riesgo de padecerla, su médico debe hacerle preguntas acerca de su estilo de vida e historia médica. Entre las cosas que es importante que sepa es si en su familia alguien ha padecido osteoporosis ( si algún familiar suyo ha perdido estatura) o si se han fracturado huesos. Basado en este interrogatorio, el doctor juzgará si es necesario practicarle una medición de su masa ósea, que es un estudio sencillo e indoloro que usa cantidades muy pequeñas de rayos X (habitualmente 1/10 menos de la radiación que se recibe por una radiografía del tórax) que determinará la densidad o grosor de sus huesos. Los estudios rutinarios de rayos

X, que muchos médicos aún usan en estos casos, no son lo suficientemente sensibles para detectar osteoporosis hasta que ya se hayan perdido grandes cantidades de tejido óseo.

Una medición de la masa ósea frecuentemente es un auxiliar inapreciable al decidir cuándo empezar un programa de prevención o tratamiento además de permitir medir OBJETIVA y EXACTAMENTE los progresos del mismo.

​​​​​​​Tratamiento de Osteoporosis

Existe una variedad de tratamientos disponibles para disminuir la pérdida de hueso y prevenir las fracturas causadas por la osteoporosis.

Si a usted le han diagnosticado esta enfermedad, existen programas de tratamientos adecuados para cada quien, siempre bajo la supervisión de su médico o grupo de médicos.

Como los estrógenos son tan importantes para mantener el hueso en la mujer, los médicos con frecuencia prescribimos terapia de reemplazo hormonal con estrógeno en mujeres posmenopáusicas, que es la mejor forma disponible actualmente para proteger el hueso durante los años de pérdida acelerada posmenopáusica; aún cuando los estrógenos se inicien en etapas tardías de la vida PUEDEN PREVENIR FRACTURAS DE CADERA.

Existen otros métodos de tratamiento, aprobados en algunos países y en investigación en México y Estados unidos, como el fluoruro de sodio y los bifosfonatos, de los que se esperan grandes cosas en un futuro cercano.

Evitando caídas y otras lesiones.

Si usted tiene osteoporosis, además del programa específico de tratamiento al que se someta, es posible que necesite hacer algunos cambios en su vida diaria para evitar caídas u otras situaciones que pueden causarle

lesiones. Hacer su ambiente "a prueba de caídas" no es tan difícil; algunos tips generales fácil de seguir son usar zapatos cómodos, tacón bajo y suela suave, evitando pantuflas ligeras y sandalias; o preguntara a su médico si algún medicamento que este tomando puede ocasionar mareo, pérdida de equilibrio o que vea puntos luminosos y si es así saber que puede hacer usted para prevenirlo. En casa: Minimizar desorden (tiradero) en toda la casa. Asegure todas las alfombras y evite el uso de tapetes que fácilmente pueden deslizarse. Remueva todos los cables sueltos que pueden tropezarlo(a). Asegúrese de instalar cinta antiderrapante y barandales en la escalera, y que

permanezcan seguros. Mantenga los vestíbulos, escaleras y entradas bien iluminadas. Use luces de noche en su recámara, baño, y si es necesario, pasillo. En el baño instale jaboneras de agarradera o barras de sujeción así como cinta antiderrapantes en la tina o regadera. En la cocina use tapetes de hule antiderrapantes cerca del fregadero y estufa. Evite el uso de ceras resbalosas, cerciórese si el piso está mojado y limpie de inmediato si derrama algún líquido. Al manejar: use cinturón de seguridad. Ajuste el asiento de manera adecuada.

Mito # 1: "La Osteoporosis no es algo tan serio como para preocuparse"
La osteoporosis es algo serio porque debilita nuestros huesos de una manera progresiva e irreversible hasta el punto de que cualquier cosa puede causar una dolorosa y debilitante fractura de cadera, columna u otros huesos. El dolor crónico y la incapacidad que le causa una de éstas, puede cambiar su forma de vivir, trabajar y disfrutar de su tiempo libre.

Mito # 2: "Soy una persona saludable, hago las cosas correctas, no estoy en riesgo"
Desafortunadamente, no podemos "sentir" qué tan fuertes son nuestros huesos. Por eso la osteoporosis ha recibido el nombre de "ladrón silencioso". Sin usted saberlo puede estar perdiendo tejido óseo, aún cuando haga ejercicio y lleve una dieta rica en calcio. Su médico y la National Osteoporosis Foundation pueden ayudarle a saber otros factores que le pueden ayudar a desarrollar la enfermedad y lo que debemos hacer para detenerla.

Mito # 3: "Soy muy joven para preocuparme ahora por la Osteoporosis"
Nunca es demasiado temprano para prevenir esta enfermedad. Desarrollar huesos fuertes y mantenerlos así es un buen principio para cuando inicie la pérdida de hueso. El hecho es que el hueso es un tejido vivo, en crecimiento y que constantemente se remodela. La fuerza ósea se incrementa durante la juventud hasta que se alcanza la "masa ósea pico" alrededor de los veintes o inicio de los treinta. A partir de entonces comienza una pérdida gradual de tejido óseo. Cuando la mujer pierde el efecto protector de los estrógenos al llegar a la menopausia, se desarrolla la enfermedad. La Osteoporosis no solamente sucede cuando uno es "viejo". Se inicia años, incluso décadas antes.

Mito # 4: "Es demasiado tarde para que yo haga algo respecto a Osteoporosis"

La osteoporosis se define como la pérdida excesiva de tejido óseo. Los huesos se rompen cuando se han vuelto demasiado delgados y débiles, aunque la pérdida de hueso es irreversible, nunca es demasiado tarde para hacer algo que disminuya o detenga una mayor pérdida de hueso. El tiempo para detectar osteoporosis es AHORA, antes que se pierda tanto hueso como para que se produzcan fracturas debilitantes. Si se le ha diagnosticado osteoporosis su médico puede prescribirle un programa dietético y de ejercicios adecuado a sus necesidades. También hay varios medicamentos como estrógenos, calcitonina y derivados de la vitamina D que están disponibles para prevenir un mayor pérdida ósea y conservar un estilo de vida activo, evitando las consecuencias de la osteoporosis.
Hable con su médico u organización de salud calificados, para recibir información que le permita llevar a cabo el tratamiento o cuidado preventivo correcto para prevenir la Osteoporosis

Fuentes: www.geocities.com

Ulceras por Presión

En la prevención está el mejor cuidado

Ulceras por Presión

¿Qué son las úlceras por presión?

Las úlceras por presión pueden producirse cuando una persona está postrada, inconsciente, no siente dolor o se encuentra inmovilizada. Las úlceras por presión son lesiones que se desarrollan en zonas de la piel sometidas a presión bien sea porque el paciente deba permanecer en cama, esté sentado en una silla de ruedas y, o lleve un yeso durante un período prolongado.

¿Por qué se produce una úlcera por presión?

Las úlceras por presión se producen cuando se interrumpe la irrigación sanguínea a la piel por más de dos a tres horas. A medida que la piel se deteriora, se forma la úlcera, que primero se presenta como una zona enrojecida y dolorosa, y más tarde adopta un color morado. Si la lesión no se trata, puede abrirse e infectarse. Una úlcera de este tipo puede hacerse más profunda y afectar el músculo. Una vez que se han generado, la curación suele ser lenta. La localización habitual de las úlceras por presión es la zona de los glúteos (sobre la cresta ilíaca o el sacro) o los talones.

Prevención de las úlceras por presión:

Las úlceras por presión pueden prevenirse controlando la aparición de zonas enrojecidas, el primer signo del colapso de la piel. Otros métodos para prevenir la formación de úlceras por presión o su avance una vez que se desarrollaron incluyen los siguientes:

· Cambio de posición frecuente.

· Uso de materiales blandos para acolchar sillas de rueda y camas, con el fin de reducir la presión.

· Proporcionar cuidados adecuados de la piel, manteniéndola limpia y seca.

Tratamiento de las úlceras por presión:

El médico determinará el tratamiento específico de las úlceras por presión según la gravedad de la condición. Una vez que la piel se ha roto, es posible que el tratamiento sea más difícil y puede incluir:

· Eliminar la presión en la zona afectada.

· Proteger la lesión con gasas impregnadas con medicamentos u otros apósitos especiales.

· Mantener limpia la lesión.

· Trasplantar piel sana a la zona lesionada.

· Medicamentos (es decir, antibióticos para tratar la infección).


Fuentes: Methodist Health Care System

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